La dislexia es un trastorno del aprendizaje de la lectoescritura que se caracteriza por influir sobre la capacidad de la lectura, la escritura, la realización de cálculos y la memoria a corto plazo. Se manifiesta como una dificultad para la distinción y memorización de letras o grupos de letras, falta de orden y ritmo en la colocación, mala estructuración de frases, etc. La dislexia afecta tanto a la lectura como a la escritura. Se da en niños y niñas que no presentan ningún problema físico, psíquico ni sociocultural.
El principal inconveniente que tiene la dislexia es que no es compatible con nuestro sistema educativo, ya que todos los aprendizajes se realizan a través del código escrito. Suele pasar que el niño o niña disléxico ha de poner tanto esfuerzo en sus tareas escolares que tiende a cansarse en exceso, distraerse, perder la concentración y, como consecuencia, a rechazarlas.
En este contexto, desde el centro docente es el especialista en Audición y Lenguaje quien ha de identificar este comportamiento, asociando estas conductas a la presencia de una posible dislexia, iniciando así una intervención de carácter educativo, una labor que ha de tener continuidad con otro profesional del ámbito sanitario: el logopeda.
Según la orden 20/2019, de 30 de abril, de la Conselleria de Educación:
‘El personal especializado de Audición y Lenguaje y de Fisioterapia tiene que llevar a cabo una intervención de carácter educativo con criterios inclusivos. Las intervenciones con carácter médico o sanitarias se tienen que derivar y atender desde el sistema de salud, procurando que, siempre que sea necesario, haya una coordinación adecuada entre el centro docente y los servicios sanitarios, con el objetivo de mejorar la efectividad de estas intervenciones’.
El profesional de la Logopedia recibe una preparación específica durante su formación universitaria que le capacita para realizar con todas las garantías la evaluación, el diagnóstico y el tratamiento de la dislexia.
Los logopedas son diplomados sanitarios, tal como reconoce la Ley de Ordenación de las Profesiones Sanitarias L.O.P.S. (Ley 44/2003, de 21 de noviembre, de ordenación de las profesiones sanitarias): ‘Los diplomados universitarios en Logopedia desarrollan las actividades de prevención, evaluación y recuperación de los trastornos de la audición, la fonación y del lenguaje, mediante técnicas terapéuticas propias de su disciplina’.
Ante un caso de dislexia, el trabajo combinado y una comunicación fluida entre el docente de Audición y Lenguaje y el logopeda como profesional sanitario es fundamental.
DytectiveU, la aplicación capaz de potenciar otras capacidades del aprendizaje
La organización Change Dyslexia, fundada por la investigadora Luz Rello, ha desarrollado una práctica herramienta para potenciar otras capacidades de aprendizaje y que se adapta al modo en el que aprende un niño o niña con dislexia.
La aplicación, llamada DytectiveU cuenta con todas las garantías científicas y ya se utiliza en numerosos colegios para detectar y tratar la dislexia desde los primeros años. Según su creadora, DytectiveU es similar a un videojuego, pero con la finalidad de no realizar faltas de ortografía, mejora la forma de escritura y aumenta la rapidez y soltura. Son más de 40.000 ejercicios y programas formativos. Además, cuenta con una conexión asistencial con logopedas y profesores en los colegios.
